Quinta Calzadilla ó Villa Saldías
Liniers 723.
Santiago Álvaro Calzadilla González nació en Buenos Aires en 1816, fue hijo de Dña. Manuela Victoria Gómez Vidal (1787/1875) y de Dn. Santiago Calzadilla (1783/1883), el que fuera funcionario de Aduanas durante los gobiernos de Juan Manuel de Rosas y, más tarde, presidente del Club del Progreso.
Calzadilla fue militar del Ejército Argentino, socialmente, se destacó como gran conversador en reuniones del Club que presidiera su padre, en las tertulias caseras que acostumbraban darse entre la alta burguesía porteña de la época, como así también por su paso por el Tigre Hotel.
Construyó su quinta en 1856 y se casó con Elvira Lavalleja Monterroso (1834/1888) en 1862, la casa fue ideada para usar como residencia de verano, con lujos desmedidos para esa época: anchas paredes, chimenea en el comedor, bronces muy trabajados, cerámicas y pisos de parquet importados; en la galería baldosas rojas, azules y blancas en alegre juego.
Además de militar, fue escritor y el primer crítico musical del periodismo bonaerense y un más que correcto pianista. La intensa vida social que llevó le permitió acumular experiencias y anécdotas que solía referir en ocasiones a sus amigos, los que lo motivaban a que las publicara en un libro.
En dicha finca vivió los últimos años de su vida y por ella, como invitados del matrimonio, pasaron conocidos personajes de la Argentina de fines del siglo XIX. Entre ellos, en 1859, pasó una temporada Prilidiano Pueyrredón, que pintó en esa casa, los retratos de Calzadilla, su esposa y varios otros óleos que actualmente se atesoran en el Museo Nacional de Bellas Artes.
En 1890, Adolfo Saldías, amigo de Calzadilla, le publicó algunos artículos de costumbres en la columna que tenía a su cargo en el diario La Nación. A raíz del éxito obtenido entre los lectores, especialmente el público femenino, es que Calzadilla se decide a escribir “Las beldades de mi tiempo” publicado en 1891, se trata de un libro de costumbres que describe al Buenos Aires de esa época y rumores en el Pueblo de las Conchas.
Santiago Calzadilla murió en Buenos Aires en 1896 y nunca se conoció el segundo tomo, prometido en el primero. Sus restos descansan en el cementerio de la Recoleta.
A la muerte de Calzadilla, su íntimo amigo Adolfo Saldías Castellone, adquirió la casa, Saldías fue un historiador, abogado, político, militar y diplomático argentino. Participó activamente en la Revolución del 90 y fue uno de los primeros en entrar al Parque de Artillería, junto a Leandro Alem, siendo detenido y desterrado a Uruguay.
Fundador de la Unión Cívica Radical en 1891, volvió a ser parte de una insurrección armada en la Revolución de 1893, siendo nuevamente detenido, encarcelado en Ushuaia y nuevamente desterrado a Uruguay.
En 1898 fue Ministro de Obras Públicas y en 1902 Vicegobernador de la Provincia de Buenos Aires, acompañando a Bernardo de Irigoyen.
Fue un activo miembro de la masonería argentina. José María Rosa y Fermín Chávez reconocen en Saldías al precursor de la escuela revisionista. Escribió obras sobre la vida de Rosas y la Confederación Argentina, que aunque le ganaron prestigio intelectual y sus libros eran de los de mayores ventas, le granjeó el favor de la "intelectualidad" porteña.
En 1881 publicó su primera versión de lo que en 1888 se convertiría en su obra maestra, Historia de la Confederación Argentina. Ingenuamente, se lo dedicó a Mitre y se lo envió para que lo juzgara. Mitre le respondió lapidariamente, condenando el trabajo, sus conclusiones y a su autor. Y la prensa ocultó el libro a conciencia, limitando enormemente su publicación. Como autor, fue prácticamente condenado a la muerte civil, ya que no fue comentado en la prensa, ni siquiera para condenarlo.
Adolfo Saldías Castellone, falleció en La Paz Bolivia el 17 de octubre de 1914, a la edad de 65 años.
Durante casi todo el siglo XX, la quinta se llamó Villa Saldías. Últimamente, las autoridades municipales han restituido el nombre original a la casa volviendo a ser Quinta Calzadilla.